En primavera, cuando empieza a calentar el sol y al final del verano, conviene limpiar nuestros toldos.
Limpiar el todo no es algo difícil pero tenemos que tener cuidado. Lo más importante es hacerlo con seguridad, sobre todo si nos vamos a subir a alguna escalera, o lo vamos a limpiar desde cierta altura.
Los toldos son elementos que se encuentran a la intemperie, por lo que es normal que acumulen suciedad. Las más difíciles de limpiar son lasque vienen de la lluvia. Por eso es muy importante plegar el toldo cuando va a llover. Para evitar esta situación se pueden domotizar los toldos y así, poder guardarlos cuando empieza a llover desde cualquier punto del planeta.
Como se limpia un toldo
Retira la suciedad suelta: Antes de comenzar a limpiar, sacude el toldo para retirar cualquier suciedad o polvo suelto. Si hay manchas persistentes, utiliza una escoba suave para frotarlas.
Limpia con agua y jabón: Prepara una solución de agua y jabón suave en un cubo. Humedece una esponja o un paño limpio en la solución y frota suavemente el toldo en toda su superficie. Evita utilizar productos de limpieza agresivos o cepillos duros que puedan dañar el material.
Enjuaga con agua limpia: Después de limpiar el toldo con jabón, enjuágalo bien con agua limpia para retirar cualquier residuo de jabón. Puedes usar una manguera o un cubo de agua limpia y un paño limpio para enjuagar el toldo.
Deja secar al aire libre: Una vez que hayas terminado de limpiar y enjuagar el toldo, déjalo secar al aire libre. No lo enrolles o dobles hasta que esté completamente seco.
Usa un protector solar especial para toldos: Después de limpiar el toldo, puedes aplicar un protector solar especial para toldos y carpas para protegerlo de los rayos UV y prolongar su vida útil.